Personajes Alfonso Diez |
*
Esta es una llamada de alerta para que se recupere
* Lo
que se desprende de sus revelaciones
* Finalmente saldrá a la luz su autobiografía
Me he reunido con José José en diversas ocasiones. Hemos presenciado
juntos algún show. He estado en su casa. Y he publicado algunas entrevistas que
le he hecho. Además, desde luego, de haber disfrutado de sus interpretaciones,
como todos. Lo aprecio, lo respeto y he respetado su vida íntima.
Ahora es el momento de tocar las fibras más profundas y analizar el
punto de quiebre que atraviesa uno de los artistas más queridos en México y en
otros países.
Finalmente, el cantante abre las puertas de su comportamiento y da a
conocer no solamente la línea vital que ha recorrido, sino qué piensa y qué lo
motiva a actuar de la manera que lo hace. Descubre sus sentimientos más íntimos
y qué cree él que lo empuja hacia arriba y hacia abajo en esa montaña rusa en
que se ha convertido su propia vida.
José se ha sometido al psicoanálisis y lo que pronto saldrá a la luz
nos permite formarnos una opinión y expresarla sin temor a ser indiscretos, en
virtud de que él mismo hace las revelaciones. Todo parte del manuscrito sobre
su vida que recién terminó y que pronto estará en librerías.
Revela ahí, entre otras cosas, que los médicos que ha consultado le
dicen que su garganta no tiene nada y que debería poder cantar como antes lo
hacía. Pero él sigue con el problema: cuando tiene que cantar en algún evento
público, o hacerlo para grabar el disco que se le requiere, se le cierra la
garganta y casi no puede hablar. Lo mismo le sucedió cuando grabó un papel
protagónico para la telenovela “La fea más bella”, al final tuvo que regrabar
su voz.
Para explicarse lo que le sucede, atribuye todos sus problemas a
“los actos de brujería” a que lo tiene sometido su ex esposa, Anel. La mayoría
de sus amigos, “hermanos” les llama él, son supuestos expertos en hierbas y
brujería a los que consulta con frecuencia.
Todos, sin excepción, lo azuzan contra su ex mujer y le ofrecen
ayudarlo a salir del embrujo que “le ha quitado la voz y pretende acabar con su
vida”.
Hasta este punto, es más que evidente que José se equivoca y que ha
llegado el momento de hacerle notar el enorme error que comete al aceptar tal
explicación como causa de los problemas que ahora hace públicos en toda su magnitud.
Histeria conversiva y
los charlatanes de la brujería
El primer caso de tratamiento psicoanalítico de Sigmund Freud fue el
de una mujer que permanecía en silla de ruedas porque, obviamente, no podía
caminar. Los médicos no encontraban ningún problema fisiológico que se lo
impidiera. Fue hasta que se sometió a psicoanálisis con Freud que descubrió la
causa inconciente de su enfermedad y se pudo curar.
Fue el caso también de la jovencita que competía por la corona que
otorgaban a la más bella de su escuela. Vendió boletos y trabajó arduamente
para ganar, pero el día de la votación se quedó ciega. Simplemente “no quería
ver la realidad”.
Cuando supo que había ganado recuperó la vista. Igual que en el caso
anterior, no había ningún daño que explicara su ceguera. Fue tratada por un
psicoanalista que después de algún tiempo la ayudó a descubrir en que rincón de
su infancia estaba el problema que ahora la aquejaba.
Ese tipo de casos ha sido ya estudiado a fondo. Se le denomina
“Histeria Conversiva” y se refiere a las enfermedades psicosomáticas, que no
tienen explicación en algún problema fisiológico porque no la hay, el problema
radica en los propios problemas psicológicos.
Es el caso de José José. Su garganta no tiene nada, le han dicho los
médicos, por lo que su problema es psicológico. Requiere del tratamiento
psicoanalítico.
Pero no tiene nada que ver con la brujería. La brujería sólo sirve para que algunos charlatanes se aprovechen de
las personas que creen en ella. Para sacarles dinero.
Que quede claro: Nadie
puede embrujar a otra persona, ni con hierbas ni con ningún otro artificio. Tales prácticas
pertenecen al pasado. Son parte de la época en que mucha gente era ignorante y
creía que con quemar algunas hierbas, dar algunos pases mágicos, o ponerle alfileres
a muñecos rudimentarios se podía cambiar la forma de ser de alguna persona.
Pero eso es falso. Sólo las drogas logran ese efecto. A distancia y
con magia o brujería nadie puede hacerle daño a otra persona.
Basta analizar a los supuestos brujos. Generalmente son personas sin
cultura, sin conocimientos académicos de ninguna especie, que se autonombran
doctores en ciencias esotéricas que ninguna universidad tiene en su plan de
estudios porque son tomadas de pelo, para estafar incautos.
Abre los ojos José
De la misma manera que despediste a tu grupo de amigos alcohólicos,
hazlo ahora con todos los supuestos brujos y sométete a tratamiento con un
psicoanalista ortodoxo (freudiano), porque en esa rama también hay muchos con
los que no se obtienen resultados. Hay diversos parámetros para determinar si
caíste en buenas manos, pero el principal es que empieces a recuperar la voz y
eso sucederá cuando descubras, en medio del tratamiento, qué grave problema te
afecta desde la niñez.
Ésta es mi vida
Ahora la autobiografía: Hace algunos meses José José declaró que
estaba escribiendo un libro sobre su vida en el que contaría todo y respondería
a todos los ataques que le hacía, sobre todo, su ex esposa, Anel.
La promesa está a punto de cumplirse. El manuscrito ya fue entregado
a la Editorial Grijalbo, que prepara el lanzamiento del libro.
El título del texto autobiográfico es “Ésta es mi vida” y José la
narra en primera persona. Tiene 458 páginas y consta de 32 capítulos en los que
el cantante habla de todo, desde sus inicios hasta los sucesos de los últimos
días.
En el primer capítulo, “El Triste”, describe cómo fue y cómo vivió
el éxito de esta canción que le compuso Roberto Cantoral para su tercer disco
LP y para competir en la Segunda Edición del Festival de la Canción Latina, que
después se convertiría en OTI.
En el segundo capítulo, “Quisiera ser” habla de su nacimiento, su
familia, su escuela, sus primeros trabajos y sus primeras incursiones en el
canto. Cómo lo descubrió Rubén Fuentes y de qué manera comenzó a grabar con RCA
Victor.
Detalla en el libro quién fue la primer mujer de la que se enamoró.
También escribe sobre Kiki Herrera Calles, de Anel, de triunfos y fracasos y
claro, de la brujería.
Casi todos los capítulos tienen el nombre de alguna de sus canciones:
La Nave del Olvido, Dos, Alguien Vendrá, Sólo una Mujer, No me platiques más,
Sólo yo Seguiré Siendo Tuyo…
Aunque otros se refieren a momentos especiales de su vida: Nace
Pepito, Bautizo y Boda, Comienza mi Psicoanálisis…
Decenas de fotos inéditas muestran a sus padres, a sus abuelos, su
infancia, sus primeros pasos en la música y su camino al éxito.
32 capítulos que terminan cuando agradece a Dios por haberle
devuelto a Pepito, su hijo: “surgió el Pepe que yo conocía, el niño al que yo
eduqué lleno de amor y que era mi mejor amigo”. Y dos páginas antes, lo que
sucedió la tarde del 5 de junio de 2007: cómo le dio la parálisis facial y qué
ha hecho para recuperarse.
El querido cantante se dirige finalmente a sus lectores: “que Dios los bendiga y nunca les pase nada de lo que me ha sucedido a mí”. |